El Príncipe Harry y la Duquesa de Sussex Meghan Markle, después de largas discusiones, decidieron renunciar a todos los deberes reales y comenzar una vida independiente. El Palacio de
Buckingham ha emitido una declaración de la pareja, que dijo que pasarían un tiempo conectando los Estados Unidos y el Reino Unido y así permanecerían en
contacto con la Familia Real.
"Este equilibrio geográfico nos permitirá criar a nuestro hijo con respeto a la tradición real en la que nació, y al mismo tiempo dar a nuestra familia tiempo suficiente para nuevos capítulos en
nuestras vidas", decía.
Esta repentina y dramática decisión se tomó después de que Harry y Meghan pasaran seis semanas de vacaciones en Canadá con su hijo Archie de ocho meses, lejos de la
familia real.
"Después de meses de reflexión y discusiones internas, hemos decidido hacer cambios este año, y empezaremos a cambiar nuestros papeles. Tenemos la intención de retirarnos como miembros 'mayores' de la Familia Real y trabajar para ser financieramente independientes. Al hacerlo, continuamos estando totalmente comprometidos a apoyar a Su Majestad la Reina",
dice la declaración.
Recordemos que el Príncipe Harry y Meghan Markle fueron con su hijo de ocho meses Archie a Canadá a finales de noviembre del año pasado cuando su portavoz reveló que la pareja había decidido retirarse y dedicarse a la familia después de un año marcado por su "lucha" con los roles reales. Así que "evitaron" la tradicional celebración de las fiestas de Año Nuevo como parte de la Familia Real, y desde la fiesta también compartieron una de las pocas fotos privadas de su hijo para felicitar a los fans de Año Nuevo.
